Fue ídolo en Chivas, salió campeón y lo obligaron a jugar con los wilos

Si bien existen muchos casos de jugadores de cambiaron de colores por dinero y terminaron jugando en el odiado rival de su equipo, ese no es el caso de Ramón Ramírez, quién jugó en América prácticamente en contra de su voluntad.

El histórico mediocampista del Rebaño fue vendido al América por el entonces dueño del equipo Salvador Martínez Garza, obligando a Ramón Ramírez a vestir los colores azulcremas en dónde jamás se sintió identificado y terminó emigrando a los Tigres.

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Con América jamás pudo identificarse con la afición ni el equipo pues tenía ya muy arraigados los colores del Rebaño, pero al ser un profesional cumplió con su contrato durante su estancia con las águilas.

Al poco tiempo de estar con América, Ramírez se terminó marchando a los Tigres en dónde elevó su nivel, pero nunca al grado del futbol que desplegó con Chivas y desafortunadamente cuando pertenecía al cuadro universitario libró un duro proceso penal por un incidente automovilístico en el que estuvo involucrado y que detuvo su carrera por varios meses.

Pudo continuar con su carrera y volver a brillar en Chivas

Tras varios meses de proceso llegar, finalmente Ramón Ramírez fue absuelto y pudo volver a las canchas con Tigres para solamente un par de temporadas después, finalmente regresar al equipo de sus amores y dónde disputó varias temporadas más incluso llegando a otra final con el Rebaño en el Clausura 2004.