No solo dirigió al más grande, la vez en la que Almeyda fue técnico de una selección por un día

Matías Almeyda en 2015 estuvo cerca de ser el nuevo entrenador de Ecuador, incluso lo fue por una noche: "Fui entrenador de la selección de Ecuador por una noche. Nadie supo. Me llamaron, ya estaba todo arreglado. Cuando voy a la mañana, veo mensaje del presidente del fútbol ecuatoriano ‘Mire Almeyda, tuvimos un problema, me llamó el Presidente de la Nación y el entrenador va a ser otro’. Y bueno, está bien", esto lo comentó en una entrevista con Fernando Carlos en 2020.

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Un rechazo que cambió la historia

Lo verdaderamente curioso y con profundas implicaciones para la historia de Chivas es que aquel efímero paso de Matías Almeyda por la dirección técnica de Ecuador en 2015, aunque se desvaneció en una sola noche, representó una encrucijada crucial en su carrera y en el destino del Rebaño Sagrado.

Si aquel acuerdo se hubiera materializado y Almeyda hubiera asumido el mando de "La Tri" de manera prolongada, su llegada al banquillo de Chivas tras su salida de Banfield, un movimiento que marcó un antes y un después en la historia reciente del club, nunca habría tenido lugar.

Esta alteración del curso de los acontecimientos habría privado a la afición rojiblanca de la alegría de celebrar títulos importantes bajo su liderazgo, de la conexión especial que se forjó entre el "Pelado" y la hinchada, y de una de las etapas más exitosas y recordadas de los últimos tiempos, evidenciando cómo un instante fugaz en el tiempo puede generar un efecto mariposa de proporciones significativas en el impredecible universo del fútbol.

Un entrenador que dejó huella

El paso de Matías Almeyda por el banquillo de Chivas fue una época dorada para el club, marcada por la obtención de cinco títulos que incluyeron una Liga MX, dos Copas MX y una Supercopa MX, además de un ascenso. Este exitoso palmarés consolidó al "Pelado" como uno de los entrenadores más laureados y recordados con cariño por la afición rojiblanca, dejando un legado imborrable en la historia del equipo.

Un sueño que se le puede cumplir

La confesión de Matías Almeyda sobre su anhelo de dirigir una selección nacional revela una aspiración importante en su carrera. Tras su experiencia cercana con el banquillo de Ecuador en 2015, la posibilidad de que este sueño se concrete en algún momento futuro se mantiene latente, considerando su exitosa trayectoria y su deseo de incursionar en el ámbito de las selecciones.