Por Daniel Sanchez
La que es recordada como una de las mejores noches en la historia del Rebaño, fue aquella en los cuartos de final de la Copa Libertadores del 2005 cuando Chivas humilló a Boca Juniors 4-0 frente a un abarrotado Estadio Jalisco.
Sin embargo, en el partido de vuelta las cosas no fueron fáciles para Chivas y no tanto por lo futbolístico pues Boca era incapaz de hacerse presente en el marcador y su eliminación estaba a la vuelta de la esquina, por lo que el equipo perdió la cabeza, especialmente su entrenador Jorge Benítez.
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Durante el partido de vuelta Boca fue incapaz de hacerle daño a la defensa del Rebaño y a 15 minutos del final, el árbitro decidió expulsar a un jugador del equipo argentino y Adolfo Bautista, quien ante la furia del estadio tuvo que ser escoltado por la policía para salir de la cancha, ahí fue donde se encontró con Benítez.
Mientras pasaba por enfrente de la banca de Boca, el "Chino" Benítez escupió al rostro del mexicano en un acto de bajeza e impotencia al no poder con el Rebaño lo que, a la postre acabó con su carrera siendo despedido de boca y solamente llegando a dirigir equipos como Deportivo Quito y Municipal de Guatemala sin lograr transcender; actualmente no tiene equipo.
Hoy Benítez sabe que se equivocó y está consiente que ese incidente le arruinó la carrera, sin embargo, asegura que 15 días después de haber sido despedido viajó a México para disculparse con Bautista. "Me pagué un pasaje de avión y un hotel y me fui a México para pedir disculpas [...] El escupitajo al Bofo arruinó mi carrera, seguro, por lo moralistas", declaró al diario el Clarín.
22/12/2024
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