Por Daniel Sanchez
No cabe de duda de que el equipo amarillo corrupto está acostumbrado a sacar ventaja en la Liga MX, a que el arbitraje y el VAR estén de su lado, a jugar con uno más, a tener los penales a su favor, a que las decisiones polémicas sean a su favor y también quieren que sea lo mismo en la Concacaf, pues les habían marcado un penal insólito que tuvo que ser corregido por el mismo VAR porque era un error rotundo del árbitro central.
Los amarillos siempre están buscando hasta el más mínimo detalle para sacar ventaja en los partidos, siempre quieren que les marquen todas las divididas y quieren calentar el partido cuando no les están marcando a su favor, así sucedió al final del primer tiempo de este primer duelo entre el rebaño y los wilos, que se fue al descanso con la ventaja para los de Coapa.
Si bien es cierto que los clásicos se juegan a otro ritmo, que se deben jugar a otra intensidad, la realidad es que demostraron que no saben ganar tampoco, pues en la última jugada de la primera mitad, Álvaro Fidalgo se calentó con el lateral del Guadalajara, pero el cuerpo técnico de los wilos demostró su lado más bajo y antideportivo.
Aprovechando que los ánimos se calentaron al finalizar la primera mitad del primer duelo entre Chivas y América, se pudo apreciar que Fidalgo y Mozo tuvieron un intercambio de palabras e incluso de empujones, Alan se fue con rumbo al vestidor tratando de ignorar lo que le decían los jugadores amarillos, pero mientras los americanistas separaban al español, el cuerpo técnico de Jardine fue a buscar a Mozo a ver si lograban provocarlo y sacarlo de sus casillas, buscando que si había un par de tarjetas rojas, fuese un hombre del cuerpo técnico de los wilos contra un jugador de campo del rebaño.
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