La partida sorpresiva de Fernando Gago dejó una profunda huella en el vestidor de Chivas. Más allá de los resultados deportivos, la forma en que se gestó esta separación generó un clima de incertidumbre y desazón entre los jugadores, tal como lo reveló Roberto Alvarado en una reciente entrevista en el podcast El RePortero. Chivas termino fracasando con el DT interino Arturo Ortega al caer en juego de Play-In ante Atlas, tras la partida de Gago y ahora tendrían un nuevo estratega en el español Óscar García.
El "Piojo" fue claro al expresar el sentir del plantel: "Yo me sentí triste, la neta, porque el equipo venía jugando bien. Teníamos una idea bien clara". La conexión entre los jugadores y el entrenador argentino era evidente, y su salida representó un duro golpe para el ánimo del grupo.
Gago había logrado inculcar en el equipo una identidad de juego clara y un espíritu competitivo. Los jugadores se sentían cómodos con su sistema táctico y confiaban en su capacidad para llevar al equipo a la victoria. La salida del entrenador argentino truncó un proyecto deportivo que prometía mucho.
"Trabaja bien y para mí es un entrenador muy táctico que te da todas las herramientas que para que juegues libre", aseguró Alvarado. Estas palabras reflejan la importancia que tenía Gago para el desarrollo individual de los jugadores y para el funcionamiento colectivo del equipo.
Lo que más molestó al plantel fue la forma en que se produjo la salida del entrenador argentino. La falta de comunicación y transparencia por parte de la directiva generó un clima de incertidumbre y malestar en el vestidor.
"Nadie sabe qué pasó. A mí me toca estar en la Selección esa semana que él se va. Toda esa semana que se hizo viral que se iba, nosotros le cargábamos la mano al PF (preparador físico) y a él y le decíamos ‘Boca’. Nos decían que no había nada, que se quedaban y tal", reveló el "Piojo".
Esta situación generó una sensación de traición entre los jugadores, quienes se sintieron engañados por el cuerpo técnico. La falta de honestidad por parte de Gago y su equipo generó una profunda desconfianza en el plantel.
La salida de Fernando Gago no solo tuvo un impacto inmediato en el rendimiento del equipo, sino que también podría tener consecuencias a largo plazo. La falta de estabilidad en el banquillo y la incertidumbre sobre el futuro del proyecto deportivo podrían afectar la motivación de los jugadores y generar un ambiente de inestabilidad en el vestidor.
Además, la salida de Gago podría dificultar la tarea del nuevo entrenador, quien deberá trabajar para reconstruir la confianza de los jugadores y establecer una nueva identidad de juego.
La directiva de Chivas deberá actuar con rapidez y buscar un entrenador que pueda continuar con el proyecto deportivo iniciado por Gago. Es fundamental que el nuevo técnico sea capaz de conectar con los jugadores y transmitirles un mensaje de confianza y optimismo.
Además, la directiva deberá trabajar para mejorar la comunicación con el plantel y generar un ambiente de transparencia y confianza. Solo así, Chivas podrá superar esta difícil situación y volver a ser un equipo competitivo.
La salida de Fernando Gago fue un duro golpe para Chivas. La falta de transparencia y la forma en que se produjo esta separación generó un clima de incertidumbre y desconfianza en el vestidor. Será fundamental que la directiva del club tome las medidas necesarias para superar esta situación y construir un proyecto deportivo sólido y sostenible a largo plazo.
21/12/2024
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